Lecturas sobre escritura

¿Te imaginas escribir una novela sin mencionar las redes sociales?

Sería como ignorar el elefante en la habitación. Estoy totalmente de acuerdo con Alex Dahl, la autora del artículo* que me motivó a escribir esta reseña: integrar las redes sociales y la tecnología de mensajería en nuestras historias no solo es necesario, sino que es imprescindible para no quedarnos atrás.

Piénsalo bien: antes, las novelas reproducían largas misivas para contar historias y desarrollar personajes. Hoy, los mensajes de texto, los correos electrónicos y las publicaciones en redes sociales cumplen ese mismo papel —sin papel, claro está. ¿Por qué no aprovecharlos para aumentar la vibración y la autenticidad de nuestros relatos?

La autora menciona cómo las redes sociales pueden ser herramientas poderosas para crear tensión y resolver conflictos en nuestras tramas. ¿Pueden servirnos la publicaciones de Instagram para despistar a la policía o los mensajes de WhatsApp para desvelar jugosos secretos? Las posibilidades son infinitas y, con sinceridad, ¡emocionantes para cualquier amante de los giros argumentales!

Además, si decides no usar redes sociales en tu historia, debes justificar su ausencia de manera convincente. Imagina una cabaña aislada en medio de una tormenta de nieve sin señal de móvil. Este tipo de detalles no solo hacen que la historia sea más creíble, sino que también añaden dramatismo y urgencia.

Otro punto fascinante es cómo las redes sociales pueden ayudarnos a conocer mejor a nuestros personajes. Pregúntate: ¿cómo se presentaría tu protagonista en Instagram? ¿Qué tipo de cosas compartiría en su muro de Facebook? Estos detalles pueden revelar mucho sobre su personalidad y motivaciones, y dar como resultado unos personajes más complejos y realistas.

Y no olvidemos los thrillers y novelas de crimen. Aquí, las redes sociales son oro puro. Desde el acecho digital hasta la creación de pistas falsas, pasando por la suplantación de identidad, las redes sociales pueden ser el recurso perfecto para mantener a los lectores al borde del asiento. Incluso en los romances, las redes sociales pueden generar malentendidos, celos o ayudar a reencontrar a un amor perdido, añadiendo capas de emoción y tensión.

Más allá de las historias, las redes sociales son una herramienta fantástica para los escritores en su día a día. Nos permiten conectar directamente con quienes nos leen, recibir sus opiniones y compartir nuestro proceso de escritura. Esta interacción no solo fortalece la relación con esas personas, sino que también nos mantiene motivados e inspirados.

En resumen, integrar las redes sociales en nuestras creaciones no es solo una cuestión de mantenerse al día, sino de aprovechar al máximo las oportunidades que ofrecen. Así que, la próxima vez que te sientes a escribir, no dudes en darle a tus personajes un smartphone y ver hasta dónde te lleva la trama. ¡Las posibilidades son infinitas y muy divertidas!

  • ON MESSAGE, Alex Dahl, publicado en la revista Writing Magazine de julio de 2024

Las redes sociales en la ficción moderna