Diálogo
Microrrelato
Antuán
¿Nos olvidamos a veces de nuestra sombra, o es que nuestra sombra nos abandona de vez en cuando?, le preguntaba un cuerpo opaco a la luz, en un radiante diálogo de los que nunca suceden entre gentes racionales, que se plantean cuestiones más prosaicas, como ¿llegaré a fin de mes?, ¿llueve otra vez? o ¿qué joyas me pongo hoy?
Las auténticas dudas, las que merecen las mejores reflexiones y, en consecuencia, producen las conclusiones más atinadas, son las que se formulan constantemente entre sí los entes irracionales que nos rodean, pero como no los oímos —ni los escucharíamos, aunque los oyésemos—, no podemos participar en el debate.
La sombra que proyectábamos en el pasado dejó de existir, y la luminosidad comenzó a franquearnos sin barreras. Esta habría sido la respuesta de la luz, si la pregunta procediese de algún ser pensante.